Desde el 18 de septiembre de 2006 reclamamos por Julio López. El encubrimiento del poder político y judicial a la Policía Bonaerense, han constituido de la causa, un monumento a la impunidad. 14 años sin Julio López.
Este año, su desaparición, el encubrimiento estatal a la Bonaerense y la impunidad, se actualizan a la luz de caso de la desaparición y muerte de Facundo Atudillo Castro.
Desde el inicio de la pandemia y la cuarentena obligatoria, desde el Estado y el gobierno, se empoderó a las fuerzas de seguridad y se sacó al Ejército a las calles. Esto trajo como consecuencia un trágico récord de más de 100 casos de gatillo fácil y muertes a manos de fuerzas de seguridad, donde el caso de Facundo es el más grave porque se trata de una desaparición forzada seguida de muerte. Como con Julio López, inmediatamente se activaron todos los mecanismos de encubrimiento estatales.
A catorce años de la desaparición de Julio, seguimos luchando por justicia, contra la impunidad y por el castigo a todos los responsables políticos y materiales.
Julio López y Facundo Castro, tienen en común a sus victimarios -la Policía Bonaerense-, el encubrimiento judicial y político. Otro dato los vincula, fueron víctimas de la desaparición forzada. Algo más, sus nombres se convirtieron en lucha contra la impunidad.