Una fiscal mendocina pidió hoy que sea sometido a un juicio por jurados el israelí Gilad Pereg, acusado de asesinar a su madre y a su tía, cuyos cuerpos fueron hallados enterrados en su casa de la ciudad de Guaymallén en enero de 2019, informó el Ministerio Público Fiscal provincial.

El requerimiento fue realizado por la fiscal de homicidios Claudia Ríos, quien solicitó que Pereg (38) sea juzgado por el homicidio calificado por el uso arma de fuego de su tía Lily Pereg (54) y por el homicidio agravado por el vínculo de su madre, Pyrhia Sarusi (63).

La fiscal notificó al acusado personalmente del pedido en el penal de Boulogne Sur Mer donde se encuentra alojado.

En una conferencia de prensa brindada durante esta jornada, Ríos expresó: “Hoy hemos notificado a la defensa y al imputado que será requerida la elevación a juicio de las presentes actuaciones, ya que entiende el Ministerio Público que se han reunido todas las pruebas y que hay elementos de convicción suficientes para que esta causa vaya a juicio”.

Tras destacar que los delitos que se le atribuyen al israelí prevén una pena de prisión perpetua, la fiscal dijo que se descartó en el marco de la pesquisa que el acusado sea inimputable y consideró que finge ser “gato y maúlla cuando hay cámaras”.

“Hubieron muchos planteos de nulidad, en los que la defensa sugirió que se citara a todos los peritos psiquiatras, no solamente del ámbito forense sino también del equipo interdisciplinario de la penitenciaría provincial. A pesar de nuestra oposición, el tribunal dispuso que se tomaran todas esas testimoniales”, explicó Ríos.

Y agregó: “Se concluyó que Gil Pereg comprende y está ubicado en tiempo y lugar, y comprende el proceso”.

En abril de 2019, el juez Penal 1 de Mendoza, Eduardo Martearena, confirmó la prisión preventiva que había sido dictada a Pereg en febrero de ese mismo año.

El magistrado rechazó la apelación planteada por la defensa particular del acusado, que había solicitado alojarlo en un hospital psiquiátrico, y convalidó el peritaje psiquiátrico realizado inicialmente por el Cuerpo Médico Forense que indicaba que estaba “lúcido y ubicado en tiempo y espacio”.

También dio validez a los allanamientos al domicilio del acusado, donde se hallaron los cuerpos de las hermanas Sarusi y Pereg, y se secuestraron varias armas. entre ellas la homicida, además de manchas de sangre de una de víctimas que dieron resultado positivo en el estudio de ADN.

Las hermanas israelíes fueron vistas con vida por última vez el 12 de enero del año pasado en la casa del acusado, situada en la calle Roca al 6000 de Guaymallén, y 14 días después la Policía Científica encontró los cuerpos de ambas tapados con piedras y tierra en un sector del predio.

Tras ser descubierto el doble crimen, Pereg quedó detenido y durante su estadía en la cárcel mostró comportamientos extraños y aseguró ser “un gato”, lo que reiteró en diversas oportunidades y audiencias en las que, incluso, comenzó a maullar frente a los magistrados.