Los dirigentes de FACE entienden que deben mantener y mejorar los servicios manteniendo la principal máxima “LAS PERSONAS, LO PRIMERO”” y por eso, cómo mínimo tienen que hacer una profunda reflexión y análisis de su situación en materia de igualdad; facilitar la participación de los jóvenes, su formación, su visibilidad y reconocerlos dentro del sector cooperativo como co-protagonistas. El cambio de modelo energético no puede darse sin hacer cambios en el modelo social y el económico.
En las últimas décadas empresas prestadoras de servicios públicos, tanto estatales y privadas tuvieron diferentes resultados, algunas cesaron en sus actividades, otras fueron privatizadas o estatizadas, afortunadamente el sector cooperativo se mantuvo y poco a poco se va consolidando como una alternativa que aporta un poco de luz a este negro escenario; una luz más verde, más limpia, más justa, democrática y social.
Algunas de ellas nacieron hace más de un siglo y son símbolo de resiliencia y otras muchas otras han surgido en las últimas décadas, fruto de la unión de una ciudadanía empoderada preocupada por el cambio climático, cansada de abusos y con ganas de cambiar hacia un modelo participativo, de una forma manera organizada y democrática.
En estos tiempos donde el usuarios son maltratados por muchas prestadoras de servicio donde las máquinas son las que atienden al público, los cooperativistas entienden que deben continuar siendo empresas con rostro donde aquellos que dirigen las mismas son personas surgidas de la comunidad y por eso se realizarán las jornadas en las Tierras del Libertador.
