Mucho se había hablado en el país europeo acerca de esta película. Es que la misma encara un tema tan conocido como impactante: la masacre del Circeo, un conmocionante caso de un asesinato perpetrado por tres jóvenes de clase alta en plena Roma.
Escuela Católica es el nombre de esta película, dirigida por Stefano Mordini, en la que el director profundiza sobre la educación y formación de los asesinos: Angelo Izzo, Gianni Guido y Andrea Ghira. Los mismos, criados en una burbuja de clase alta, internados de hombres y una familia que parecía interesarse muy poco por ellos.
La sinopsis oficial de la película reza: en un barrio residencial de Roma hay una conocida escuela católica donde se educa a los hijos de la clase media alta. Las familias sienten que en ese entorno sus hijos podrán crecer protegidos de la agitación que impregna la sociedad y que una educación estricta les abrirá las puertas de un futuro brillante. En la noche del 29 al 30 de septiembre de 1975 esa fortaleza de valores irreprochables se derrumbó bajo el peso de uno de los crímenes más atroces de la época: la masacre del Circeo.
Sucede que estos tres adolescentes planearon el secuestro, tortura y asesinato de dos jóvenes mujeres de clase baja. Si bien el plan no salió como planeaban, una de ellas falleció y cuando el caso fue noticia, toda la sociedad se vio cuestionada en sus prácticas. Un caso lleno de prejuicios, machismo y clasismo.