El profesional de la salud de Mendoza es especalista oftalmólogo y lleva adelante un programa de ayuda solidaria para personas que sufren serios padecimientos en la vista. Se casó en una excéntrica fiesta en Luján de Cuyo.
El excéntrico médico oftalmólogo de Mendoza, Pedro Miranda, contrajo matrimonio recientemente en una celebración que dejó diversos comentarios de valor, tanto por su forma de expresarse públicamente a favor de la familia como por las acciones que lleva adelante para ayudar a personas sin medios económicos y que sufren serios padecimientos en la vista. No pasó desapercibida su forma de vestir, en gran parte de la fiesta, con su típica capucha blanca.
La celebración se realizó en un coqueto establecimiento en el departamento de Luján de Cuyo, que integra a la Primera Zona Vitivinícola de Mendoza identificada por la variedad Malbec, en el distrito de Pedriel, que recibió el arribo de la feliz pareja en helicóptero, sorprendiendo a los presentes que desde el mediodía los esperaban mientras un ejército de mozos y mozas atendían a los invitados y eran entretenidos por artistas especialmente programados para la ocasión.
Una vez que llegaron todos buscaron el abrazo de Miranda y de su flamante esposa, Nora Nievas, con quien aprovechó la ocasión para presentar con una versión multimedia al Programa Rescate Social que lleva adelante y que está siendo representado por uno de sus pacientes ciego, Uriel Zingariello. Un joven de la localidad de Palmira, del departamento de General San Martín, que trabaja junto a Miranda para ofrecer el servicio solidario que presta en la Ciudad de Mendoza bajo el título de “Uriel al Rescate”.
La celebración que inició temprano -el 8 de octubre de 2022- en un marco natural con la imponente vista del Piedemonte mendocino, finalizó hasta entrada la madrugada del día posterior con un desfile de atención gastronómica que nunca se detuvo y que contó con un servicio de bebidas que hasta incluyó una línea propia de espumantes para la ocasión.
Con su personalísima capucha blanca fue que Pedro Miranda además fue el alma de la fiesta recordando cuando en la hinchada del Club Independiente Rivadavia -La Lepra- lo recibía en los partidos que se disputaban en la provincia cuyana.
Ahora el médico, luego de la ogligatoria luna de miel, sigue adelante con sus proyectos que dirige en su nuevo establecimiento en la Peatonal Sarmiento, en la Ciudad de Mendoza, justo frente a la Parroquia Santiago Apóstol, patrono de la provincia mediterránea y a metros de la tradicional Plaza Independencia.
