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El paso internacional volvió a congestionarse

El paso internacional entre Argentina y Chile por Mendoza volvió a congestionarse y retornaron los reclamos. Autos particulares, colectivos y transportistas sufren una tortura para ingresar a la provincia por la interminable fila de vehículos que aguardan por llegar a su destino. El caos también lo padecen los ciudadanos que intentan ingresar a Chile

El malestar en alta montaña continua y la espera de los conductores se hace interminable, el colapso en Los Libertadores afecta a miles de ciudadanos chilenos que esperan por ingresar a Mendoza. Pero la postal de un centenar de vehículos en fila se repite de ambos lados, como así también del lado argentino.

Autoridades del Sistema Integrado Cristo Redentor ya habían advertido esta situación, pero en las últimas horas se agudizó con el desembarco de turistas chilenos que aguardan con la ilusión de llegar a la provincia. La congestión de vehículos particulares en algunos casos reportan hasta 15 horas de espera para la atención de trámites aduaneros.

Pero la demora por llegar a una caseta y ser atendido no es único inconveniente, en las filas de autos y camionetas también hay enojo por la avivada de algunos conductores que intentan ganar ventaja en despiste de otros, así lo indicaron automovilistas a este medio.

Foto: Gentileza.

La reapertura del cruce fronterizo se produjo este viernes y esperan que dure varios días. En tanto, las autoridades fronterizas informaron este sábado que el paso Internacional Cristo Redentor se encuentra habilitad para todo tipo de vehículos.

Foto: Gentileza.

“Paso habilitado las 24hs. Para Transporte de Cargas, ómnibus y particulares”, expresa el comunicado de prensa. A su vez, solicitan “portación obligatoria de cadenas”.

Foto: Gentileza.

Larga fila de autos rumbo a Chile

Fuentes indicaron que solo este viernes ingresaron 6.341 turistas a la provincia, mientras que otros 3.922 ciudadanos salieron de territorio nacional rumbo a Chile. Muchas de las personas que se movilizaron a Chile son ciudadanos que habían quedado varados en Mendoza por las malas condiciones de tiempo en alta montaña.