Así lo afirmó la automovilista mendocina Julieta Gelvez, quien finalizó novena en la 7ª fecha de la Copa Abarth Argentina, disputada en La Pampa.
Julieta Gelvez, oriunda de Colonia Segovia, Guaymallén, radicada en la ciudad bonaerense de Zárate, regresó este domingo a las competencias del calendario automovilístico nacional, disputando la séptima fecha de la Copa Abarth Argentina en La Pampa. La automovilista tiene el apoyo del Gobierno de Mendoza, a través de la Subsecretaría de Deportes.
La joven pilota, que tuvo su segunda incursión en esta categoría, pudo superar algunos inconvenientes en la pista del autódromo pampeano Toay a bordo del Fiat 500 Abarth y terminó en el noveno puesto. Julieta expresó: “El objeto clave para lo que resta del año es subir al podio dos fechas de las tres que quedan” para culminar el calendario de la Copa Argentina Abarth 2022.
Explicó la mendocina: “Fue mi segunda incursión en esta categoría, que acompaña al Turismo Nacional en todas sus fechas. Yo ya había tenido una participación, pero como estaba corriendo en el Top Race Junior y en la Liga SpeedAgro Racing, no podía continuar. En la actualidad, por el tema presupuestario, me tuve que bajar de estas categorías y volví a la Copa Abarth, donde continuaré hasta fin de año, gracias al apoyo de la Subsecretaría de Deportes y de los sponsors que me acompañan”.
Al respeto, comentó: “Restan tres fechas: Trelew, Buenos Aires y Rosario. Es una categoría escuela, que está muy pareja, las sensaciones que me dejó este fin de semana fueron de felicidad. La verdad que tenía parciales muy buenos para estar en el podio. No pude redondear ninguna vuelta debido a que es un circuito donde se utiliza mucho la succión de los autos y para ello tenía que hacer una vuelta perfecta y tirar con alguien para poder meterme adelante en la clasificación”.
Manifestó al respecto: “La carrera final la largamos bajo la lluvia, con procedimiento de largada con pista mojada en fila india. Largué en la posición 12, venía para adelante como un rayo en séptimo lugar, pero cometí un exceso de confianza y bloqueé las cuatro ruedas, me pasé, volví a la pista y quedé en el puesto 11. En las vueltas restantes, pude pasar a un par de competidores, lo que me permitió terminar en la novena posición”.
“Estoy feliz –dijo–, quiero agradecer a toda la categoría de la Copa Abarth Argentina, que hace un esfuerzo enorme para que yo esté presente. A todos las sponsors que me dieron una mano en esta carrera y a mi familia, que también me ayuda, porque si no fuera por ellos, no podría pagar ni la nafta para los viajes. Y, obviamente, a la Subsecretaría de Deportes, que me acompaña y apoya para seguir estando presente en la categoría. Vengo trabajando muy firme para el año que viene, para poder estar presente en una nueva categoría de más nivel y apostando un poco más alto”.