Por CARLOS FERNÁNDEZ / Savina es el apellido de Abelardo el soñador y el nombre de una bodega. También de una finca, joven, mucho más joven que sus jóvenes artesanos encargados de cuidar la magia que se produce desde 2018 con sus vinos tintos varietales entre los que se destacan su Merlot y el mentolado Petit Verdot.
El exclusiva gama de jugos de sus uvas tintas que nacen anualmente en unas 14 hectáreas en la localidad de Lunlunta, en Maipú, Mendoza, además se completa con los varietales puros Bonarda y Malbec. Al primero lo miran con especial atención debido al interés que despierta en los visitantes que lo llegan a conocer en un verdadero jardín custodiado por un lago artificial y que al Oeste observa el final de la Precordillera de los Andes.
El emprendimiento además ofrece a los amantes vinarios un exquisito Chardonnay cuya intensidad se explica por las uvas de Gualtallary, en el Valle de Uco, maduradas a unos 1.800 metros sobre el nivel del mar, que cuando se sacude revela el ineludible aroma a pomelo rosado.
La responsable de cuidar la transformación de los jugos de las uvas en vinos es Guadalupe Savina, “con v baja”, aclara y ríe con sus 28 años recién cumplidos: está a cargo de la vinificación “desde que tenemos la finca, desde el año 2018 en el que elaboramos por primera vez en la bodeguita que tenemos aquí al lado y ya en 2019 en nuestra propia bodega”.
La nieta de Albelardo se formó enológicamente en “la Facultad Juan Agustín Maza”. Citando a uno de los enólogos más reconocidos de Argentina, a don Ángel Mendoza, cuenta que “lo conocí en el último año del secundario, en el Colegio San Pablo de Luján de Cuyo. Me enamoré de la enología cuando nos llevaron a una visita guiada”.
Y enfocada en la bodega boutique que representa explica que “estamos elaborando cerca de unos 90 mil litros. Pero lo que elaboramos y fraccionamos para nosotros no pasan más de los 30 mil o los 40 mil litros. Este años vamos a tener más líneas y por lo tanto el volumen va a crecer un poco más”.
“La elaboración de los tintos son todas con uvas propias, en la finca que, de 14 hectáreas, tenemos aquí. Las uvas provenientes de Guatallary las compramos. Pero en cuanto a las variedades tintas nos concentramos en Malbec, Petit Verdot y Bonarda. Pero para mi, mi preferido es el Merlot, que proviene del viñedo que más costó levantar. Aunque el favorito por ahora de la gente que nos conoce es el Petit Verdot”, confiesa.
La bodega que representa a tres generaciones atiende “por el momento al mercado interno, solamente en distintos puntos en Argentina por lo que nos movemos mucho a través de la venta directa desde Mendoza. También estamos en pequeñas vinotecas en Bahía Blanca, en Santa Fe, también en Rosario, pero por ahora en pequeña escala”.
Los vinos de Finca Savina, además poder ser conseguidos en la bodega de Maipú se pueden adquirir en la Vinoteca de Código Vinario, de Calle Colón y Perú en la Ciudad de Mendoza.
En cuanto a la atención a los visitantes “estamos recibiendo a los turistas y realizando visitas guiadas de lunes a sábados y los fines de semana y días feriados abrimos el restó”.