La Cámara alta trabajó desde las 11.22. Fue con el foco en la postura de Milei sobre Israel. Se avalaron los pliegos de seis embajadores. Uno de ellos es el del rabino del Presidente. La oposición pidió mantener neutralidad ante el conflicto en Medio Oriente. Además acordaron aumentos sustanciales en sus dietas
El Senado de la Nación Argentina aprobó hoy a mano alzada, sin debate, un acuerdo por el cual aumentarán las dietas de los legisladores.
Lo hizo después de haber dado luz verde a los seis pliegos de los embajadores propuestos por el presidente Javier Milei y a 20 acuerdos internacionales.
La resolución fue promovida por el salteño Juan Carlos Romero y se incorporó en el final de la sesión de este jueves. El monto podría ascender a más de seis millones de pesos en bruto. Villarruel ya se había diferenciado de Javier Milei en el tema.
Tras un mes de la última reunión, la Cámara Alta realizó este jueves la nueva sesión desde las 11.22 donde acordaron un incremento de sus dietas, de 1.4 millones a 4 millones de pesos por cada legislador.
La sesión de hoy tuvo carácter ordinario -no se llevaba a cabo una de esas características desde hace un año-, con lo cual además del temario, los senadores pudieron proponer iniciativas para su tratamiento sobre tablas.
Con cuestionamientos de la oposición hacia la política exterior del Gobierno, sobre todo respecto de la postura de Javier Milei en torno a Israel, el Senado avaló este jueves los pliegos de seis embajadores propuestos por el Poder Ejecutivo Nacional, incluido el del rabino personal del presidente, que había tenido un trámite espinoso en la Comisión de Acuerdos, divulgó Parlamentario.
El dictamen que contenía a todos los candidatos fue aprobado por unanimidad, con 66 votos positivos. Se trata de Guillermo Nielsen (Paraguay), Gerardo Werthein (Estados Unidos), Mariano Caucino (India), Ian Selecki (Francia), Sonia Cavallo (OEA) y Axel Wahnish (Israel).
Wahnish había sido cuestionado por los senadores Anabel Fernández Sagasti (UP) y Martín Lousteau (UCR) por la decisión de Milei de mudar la embajada argentina de Tel Aviv a Jerusalén. Una discusión que se dio previamente al ataque de Irán a Israel, y que sobre todo tenía que ver con algún tipo de perjuicio que eso podría ocasionar en el reclamo de soberanía de la Argentina sobre las Islas Malvinas, dado que Jerusalén es un territorio en disputa.
El cuestionamiento, sobre todo del radical, provocó que la propia canciller Diana Mondino y funcionarios de su cartera se reunieran con Lousteau por el tema. Tras ese encuentro, el presidente del partido radical y su par Maximiliano Abad adhirieron al pliego. Wahnish también mantuvo una charla privada con Lousteau.
Miembro informante como presidenta de la Comisión de Acuerdos, la senadora del Pro Guadalupe Tagliaferri destacó que los candidatos hayan asistido a audiencia pública, porque así “están respetando el rol que cumple el Congreso, el Senado”. “Se les preguntó, como es costumbre, cuál es la agenda encomendada por el Poder Ejecutivo en cada uno de los países, cuál es su perspectiva de la situación y plan de trabajo. Y esto fue contestado. También se generó un debate y se permitió un intercambio de cada uno de los senadores”, señaló.
Desde Unión por la Patria, la salteña Nora del Valle Giménez manifestó sus “preocupaciones, temores e inquietudes” respecto del “rumbo que el Ejecutivo está dando a nuestra política exterior”. Si bien reconoció que la elección de embajadores “es una competencia del presidente” y “es necesario respetar la voluntad popular”, reflexionó sobre la postura de Argentina ante conflictos internacionales.
“Enfrentamos un mundo inestable y desigual, donde conviven tensiones, enfrentamientos y conflictos”, apuntó y resaltó que “nuestra región se destaca como una región de paz, sin conflictos armados entre Estados, lo que constituye un bien estratégico a preservar”.
En ese sentido, rechazó la posición de Milei sobre Israel, algo que produce “alto riesgo” y “expone la seguridad de los argentinos”. “El alineamiento automático con Estados Unidos e Israel, ambos países que enfrentan conflictos bélicos serios en el actual contexto geopolítico, significa una verdadera ruptura en la tradición de la política exterior de neutralidad y a favor de la paz, que ha caracterizado a nuestro país por décadas”, sostuvo.
En su discurso, que no se refirió a los pliegos, el senador radical Maximiliano Abad se solidarizó con el pueblo de Israel por el ataque de Irán y pidió “hacer un llamado enérgico a la paz y estabilidad de la región”. Al recordar que el presidente invitó al comité de crisis al embajador de Israel en Argentina, Eyal Sela, el bonaerense criticó que con ese hecho “se produjo el último agravio contra la prensa” cuando “el presidente acusó a Jorge Lanata de mentiroso y de cobrar sobres”. Así, mencionó a todos los periodistas señalados por Milei e hizo una defensa sobre la libertad de expresión y de prensa, y recomendó al mandatario “bajar los decibeles”. “Le quiero decir a este Gobierno que no despilfarre la legitimidad que han tenido”, agregó.
Luego fue el turno de Martín Lousteau -que había interpelado fuertemente a Wahnish en la audiencia pública-, quien adelantó que iban a apoyar todas las postulaciones, pero se refirió a la postura del presidente sobre la mudanza de la embajada argentina a Jerusalén: “Esto entraña un riesgo de múltiples dimensiones, y es algo que está reconocido por expertos de todos los sectores”.
En primer lugar, subrayó que está la cuestión Malvinas y que hay “derecho internacional que la Argentina necesita acatar para reclamar por la soberanía de Malvinas”. Además, sería “un problema de índole político, porque la Organización de la Conferencia Islámica tiene 51 miembros, parte de esos miembros pertenecen al Comité de Descolonización y la cuestión Malvinas está en ese comité gracias al logro del presidente Arturo Illia y de su canciller (Miguel) Zabala Ortiz“, expresó.
También, tal decisión pondría en riesgo la seguridad nacional, advirtió. “Mudar la embajada contra todo este derecho internacional es una provocación innecesaria, para un país, sobre todo como la Argentina, que tuvo el atentado terrorista contra la embajada de Israel, la AMIA y el asesinato del fiscal (Alberto) Nisman”, explicó. Y asimismo, enfatizó que “Argentina tiene que velar por los nueve compatriotas que siguen secuestrados por Hamas”.
Tras recordar la audiencia que tuvieron con Mondino en el despacho de la vicepresidenta Victoria Villarruel, Lousteau reveló que este mismo jueves, la canciller envió una nota al bloque en la que afirma que “la Cancillería argentina no realizara ninguna acción en el ámbito de la política exterior que perjudique el interés nacional para lograr el objetivo de recuperar el ejercicio pleno sobre las Islas Malvinas”. “Con estas seguridades que nos ha dado Cancillería, nosotros vamos a votar todos los pliegos”, cerró el presidente del partido radical.
En el tramo final, el jefe del interbloque Unión por la Patria, José Mayans, confirmó: “Nuestro bloque va a acompañar las postulaciones de todos los embajadores, porque entendemos que es una prerrogativa constitucional del presidente”.
Sobre el conflicto en Medio Oriente, y al recordar pasajes de la Biblia, resaltó que “los Estados fueron tratando de avanzar en un problema que prácticamente es milenario”.
“No hay en este momento otro esquema superior que la neutralidad y el llamado a la paz. En la guerra, como dice el papa (Francisco), no va a ganar nadie”, manifestó y reveló que se reunió con Wahnish, quien le pareció “una persona atinada, que también lleva la propuesta de paz por parte de la Argentina”. “Nosotros acompañamos, pero no coincidimos con el presidente con la posición que tiene en política exterior”, agregó el formoseño.
En el cierre, el libertario Juan Carlos Pagotto destacó que “estamos de acuerdo que la defensa de la paz está por encima de cualquier otro interés. Creo que más allá de la prerrogativa del presidente, es la misión de todo el Senado, o de todos los que conformamos los tres poderes de la República, bregar por la paz”.