El caso que hoy representa Lourdes Arrieta en el Congreso de la Nación representando a Mendoza es emblemático, porque es quien, a pesar de haber ingresado al Congreso de la mano de Milei, expone constantemente las contradicciones del Gobierno y la falta de cumplimiento de las promesas de campaña.
El escándalo por la filtración de audios de Diego Spagnuolo en los que se relata una maniobra de recaudación ilegal a través de coimas desde la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) sigue sumando capítulos a una novela compleja que golpea de lleno a una administración que prometía asumir pata terminar con los viejos vicios de la política.
Es así que el pasado martes se reunió la Comisión de Acción Social y Salud Publica de la Cámara de Diputados, en donde se trataron varios temas, entre ellos, las interpelaciones de varios funcionarios del Gobierno Nacional entre los que se encuentran la Secretaria General de Presidencia Karina Milei y el ministro de Salud, Mario Lugones.
Sin embargo, desde la oposición en la comisión se muestran escépticos a la aparición de los funcionarios, entre los que se incluye además al subsecretario de Gestión Institucional Eduardo “Lule” Menem, por lo que no se descarta crear una comisión investigadora como sucedió con el criptoescándalo $LIBRA.
En la mencionada comisión se encuentra la mendocina Lourdes Arrieta, quien ingresó al Congreso de la mano de La Libertad Avanza pero se separó del bloque en abril del 2024 luego de la polémica visita a represores de la dictadura.
Hoy, luego de haber creado un monobloque, integra el espacio “Coherencia” en la Cámara baja junto a otros personajes también salidos del riñón del oficialismo mileista como Marcela Pagano, Carlos D’Alessandro y Gerardo González.
Se trata de diputados que tienen una visión diferente de liberalismo, más empático. No es casual que la ruptura y la salida de tres de los cuatro legisladores se haya dado en el marco de la discusión por la emergencia en discapacidad, a pocas horas de que se conociera el primer audio de Spagnuolo, ex titular de ANDIS.
Lourdes Arrieta mantiene un perfil confrontativo con el oficialismo y, tal como se ha señalado en este espacio, hoy funciona como una fuerte opositora de varias de las medidas impulsadas desde la Casa Rosada.
Tanto es así que, a pesar de no ser integrante, participó de la comisión de Libertad de Expresión donde expusieron los periodistas Jorge Rial y Mauro Federico. Ambos enfrentan un pedido de allanamiento de parte de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, hecho que no fue avalado por el fiscal Carlos Stornelli.
“Participamos de una reunión de comisión autoconvocada ante la negativa de la presidenta de la comisión, Emilia Orozco, a llevarla a cabo, en una actitud que repudiamos totalmente por ser antirreglamentaria”, sostuvo la mendocina.
“Reafirmamos nuestro compromiso inquebrantable con la libertad de expresión y la libertad de prensa, y expresamos nuestro apoyo a los periodistas Mauro Federico, Jorge Rial e Ivy Cangaro”, añadió.
De hecho, fue mucho más allá. En medio de la sesión llevada a cabo en la comisión, Arrieta hizo una petición que la enfrenta con las últimas decisiones tomadas por el Gobierno de Javier Milei: “Quiero que haya periodismo de investigación, que se nos investigue a todos, me pongo en primer lugar. Tenemos que dejarnos investigar”.
El caso de Arrieta es emblemático, porque es quien, a pesar de haber ingresado al Congreso de la mano de Milei, expone constantemente las contradicciones del Gobierno y la falta de cumplimiento de las promesas de campaña.
El posteo fijado en su cuenta personal de la red social X da cuenta de ello. “Sr. Presidente, no hable usted de transparencia ni honestidad si no la practica. Escuche, primero, al pueblo que alza su voz reclamando las promesas de campaña que jamás cumplió, porque es fácil subir al poder gracias al apoyo y trabajo de muchas personas que prestaron su tiempo, esfuerzo y recursos para que usted llegase a presidir los destinos de Argentina”, inicia el tuit.
Asimismo sostiene que “es más fácil aún, tratar a alguien de ‘traidor’, ‘blasfemo’ o ‘kuka’ cuando ya alcanzó sus objetivos. Ello es hipocresía. A ustedes les conviene que estemos sectorizados, porque eso denota que están amedrentados”.
El mensaje es completo y cargado: “Permítame decirle como una simple y humilde mendocina, que el primer traidor a dios y a la patria es usted. Yo milito, defiendo el proyecto de las ideas de la libertad; convencí a muchas personas desesperanzadas de la política tradicional que luego su gestión estafó”, resalta.
E incluso habla del insólito accionar de Milei: “Soy liberal, libertaria y rebelde desde la primera hora. Usted dijo que vino a despertar leones y es el primero que se esconde tras un grupo infame de aplaudidores y una estructura invisible de anónimos, cuyo único mérito es manipular un teclado”.
En fin. Esa es una sola muestra del descontento de Arrieta que encuentra cada vez más adeptos, tales los casos de quienes terminaron conformando el bloque “Coherencia” que vieron en el presidente una persona totalmente diferente del candidato.
