Aunque la situación económica sigue siendo compleja, un informe reciente muestra un fenómeno llamativo en el mercado laboral de Mendoza.
Aunque el turismo y la gastronomía atraviesan tiempos difíciles en Mendoza, los puestos vinculados a estos rubros siguen siendo de los más buscados por quienes aspiran a insertarse en el mundo del trabajo. Así lo reflejan los datos más recientes del informe semestral elaborado por Grupo Ceta, que analiza tendencias laborales a nivel nacional.
Entre enero y junio, el relevamiento muestra que hotelería y gastronomía concentraron buena parte del interés de los postulantes mendocinos, lo que sugiere que, más allá de la coyuntura económica, el atractivo por estas actividades no se ha desvanecido. La vocación de servicio, el deseo de capacitarse y el turismo como motor económico continúan seduciendo tanto a jóvenes como a adultos con orientación profesional.
Pero no fue el único sector con protagonismo. El estudio también revela un aumento sostenido en las búsquedas relacionadas con logística, producción, tecnología, salud y servicios, mostrando una diversificación en el panorama laboral argentino.
Empleo, informalidad y sueldos en números
Según el mismo informe, la tasa de empleo en Argentina alcanzó el 44,1%, mientras que el desempleo se ubicó en 7,9%. No obstante, el empleo informal aún representa una porción significativa: un 36,3% de las personas ocupadas trabajan fuera del sistema formal.
En cuanto a los salarios, el ingreso bruto promedio en el sector privado se ubicó en $1.674.891, lo que marca una suba del 145,5% en comparación interanual. Aun así, los valores varían según rubro y posición.
Entre los perfiles más requeridos se destacan operarios logísticos, personal de carga y descarga, camareros, mucamas, cocineros, técnicos de mantenimiento y administrativos, entre otros. Si bien la mayoría de las postulaciones a empleos operativos sigue siendo de varones (61%), se observa un avance constante de las mujeres, especialmente en áreas como atención al cliente, salud, administración y hotelería, donde ya representan el 39% de las postulaciones.

Regiones que más empleo generaron
En la comparación regional, Mendoza aparece liderando la demanda laboral en áreas clave como hotelería, logística, agroindustria y energía.
En el norte del país, Tucumán, Salta y Jujuy mostraron una alta concentración de ofertas, impulsadas por la minería y la producción. En la Patagonia, Neuquén y Río Negro destacaron en oil & gas y mantenimiento industrial. Santa Fe y Córdoba, en tanto, se movieron fuerte en manufactura, agroindustria, servicios y salud. Por su parte, Buenos Aires mostró altos niveles de actividad en logística, administración y hotelería.
Cuánto se gana según el puesto
Los salarios también marcaron cierta recuperación. En junio, operarios de depósito, pickers y personal de descarga percibieron entre $750.000 y $950.000. Los clarkistas llegaron a $1.150.000, mientras que técnicos de mantenimiento cobraron entre $1.250.000 y $1.600.000. En atención al cliente, los ingresos oscilaron entre $880.000 y $1.100.000. Cocineros, mucamas y camareros recibieron sueldos en el rango de $850.000 a $1.100.000. Los puestos administrativos promediaron entre $950.000 y $1.300.000, y los promotores de ventas alcanzaron hasta $1.450.000.
Tendencias que marcarán el empleo del futuro
De cara al próximo año, el informe de Ceta Capital Humano anticipa cinco grandes líneas de evolución laboral. Por un lado, se espera un fuerte crecimiento de la automatización operativa, que traerá consigo una mayor demanda de técnicos especializados en robótica, mantenimiento industrial inteligente y automatización de procesos (RPA). También se afianza el desarrollo de “empleos verdes”, enfocados en sustentabilidad y eficiencia energética.
La articulación entre empresas y escuelas técnicas cobra protagonismo, generando oportunidades de formación práctica en logística, agro y manufactura. La digitalización del área de Recursos Humanos sigue avanzando, con más empresas incorporando herramientas de reclutamiento y evaluación de clima laboral.
Y como tendencia transversal, se destaca el impulso a la inclusión femenina en sectores tradicionalmente masculinizados como la logística, el agro y la tecnología.