El máximo tribunal quedaría con dos vacantes si se da el escenario planteado por el abogado mendocino Pablo Pirovano en El Interactivo, programa de Ciudadano.News
La Corte Suprema de Justicia de Argentina podría quedar con solo tres magistrados en 2024 de darse el escenario, por una parte, de dilación de varios meses en la Cámara de Senadores de la Nación (por la aceptación de los candidatos de Javier Milei, Ariel Lijo y Manuel García Mansilla) y de la jubilación “definitiva” de Juan Carlos Maqueda, quien no ha solicitado su continuidad por encima de los 75 años.
Así lo planteó el mendocino Pablo Pirovano, abogado y socio en PASBBA Abogados, luego de explicar como es el procedimiento para nombrar jueces en la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el noticiero El Interactivo en vivo que se emite en las redes sociales de Ciudadano.News.
“El procedimiento está reglamentado desde el 2003, durante la presidencia de Néstor Kirchner, hay un decreto que determina la modalidad de la designación o la propuesta del Poder Ejecutivo le hace al Senado, quien es quien va a aprobar o no esa propuesta por dos tercios de sus votos de senadores sobre el candidato que propone el Poder Ejecutivo”, repasó.
Y añadió: “Este trámite determina que durante un determinado periodo de tiempo, ya está lanzado hace varias semanas, que desde presidencia se puede proponer un nombre, se tienen que publicar sus antecedentes curriculares, deben tener sus publicadas las declaraciones patrimoniales, la de la familia, las cuestiones relacionadas con sociedades y asociaciones en las que haya participado, clientes, todo lo que haga a posibilidades de incompatibilidad, de cuestiones en donde la sociedad pueda a su vez investigar o estudiar en relación con los temas patrimoniales del candidato y a partir de ahí se abre una ventana del tiempo donde la sociedad toda desde organizaciones no gubernamentales, ONG, instituciones puede observar impugnar pedirle al presidente que decline esa propuesta o apoyar ese candidato sosteniendo de manera fundada porque creen que es un buen candidato”.
Actualmente, el máximo tribunal argentino está compuesto por un presidente, Horacio Rosatti, un vicepresidente, Carlos Rosenkrantz, y dos ministros: Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti. El quinto integrante propuesto por Javier Milei es Ariel Lijo, quien ha tenido diversas resistencias que han llegado a sonar desde el mismo Wall Street Journal.
Según Pirovano, “ese periodo de tiempo se agotó el 8 de mayo en donde hubo una importante cantidad de impugnaciones, fundamentalmente de organizaciones no gubernamentales de la sociedad civil y de organizaciones referidas a la profesión de abogados, colegio de abogados de capital federal, de la ciudad de Buenos Aires, la federación Argentina del colegio de abogados de todo el país y otras instituciones, que han impugnado. Y organizaciones no gubernamentales procedentes de la sociedad civil. Y ha recibido adhesiones personales de miembros del Poder Judicial del ámbito del fuero penal que es a donde el actual, donde actúa el candidato Lijo”.
“En el caso de Mansilla también ha recibido adhesiones y observaciones no tan marcadas en cuanto a la procedencia, que es lo llamativo de Lijo. Ahora estamos en un proceso en donde el presidente tiene un período para ratificar la propuesta y elevarla al senado o puede declinar las dos propuestas o alguna de las propuestas a partir del análisis de estas impugnaciones que se han hecho”, explicó.
La propuesta de innovación que tiene el decreto de presidencia proponiendo un candidato, “propone al reemplazante de la doctora Elena Highton de Nolasco que dejó de ser jueza hace un tiempo, estaba vacante, en este caso es cierto que hay una cuestión en cuanto a la designación de una persona de género femenino porque si bien el decreto no lo impone como un cupo, si menciona que en lo posible debe respetarse la equidad de género. Con lo cual si tenemos una Corte de 4 miembros de género masculino, claramente se estaría negando en esta oportunidad porque no se estaría proponiendo a una mujer para la Corte lo cual es favorable porque una visión de una mujer en un tribunal colegiado es muy importante y en este caso no la tendríamos”.
“Pero se propone a Lijo y además se modifica el decreto 222 en cuanto a la oportunidad para proponer a un candidato y dice, cuando la vacante de un candidato que hoy ejerce también ya se sabe que hoy va a quedar, va a producirse porque en este caso no ha pedido continuidad después de los 75 años, me refiero a Maqueda, y debió haber pedido continuidad para que lo trate el Senado, es posible que se prorrogue un juez por encima de los 75 años y reciba un nuevo acuerdo del Senado, pero lo debe pedir el juez que va a cumplir esos 75 años, en este caso no sucedió”, dijo.
Al no suceder eso, “que tiene que suceder con un año de antelación, el presidente modifica el decreto y dice que no solo se va a proponer al candidato cuando hay vacante producida, sino cuando ya se sabe que la vacante va a suceder, en este caso pasa con Maqueda. Entonces lo propone adelantándose a lo que va a suceder en diciembre al doctor Mansilla. Esa es la segunda vacante que también es masculina, con lo cual pasaríamos a tener una Corte de cinco jueces pero sin ninguna presencia femenina. Eso ha sido materia de objeción por parte de muchas organizaciones que lo han puesto de resalto”.
“No hay una fecha límite para que el Senado apruebe la propuesta de la Presidencia. Presidencia si tiene que enviar el pliego a partir de que se dispara el procedimiento del decreto del 222 al Senado, pero el senado no tiene dispuesta una fecha para darle tratamiento o para votarlo en favor o en contra.
El Senado debe reunir los dos tercios de sus votos para aprobar ese pliego y puede no suceder que eso ocurra en el año y seguiríamos teniendo una Corte de cuatro jueces y posiblemente puede suceder que a partir de enero del año que viene tengamos una Corte de tres jueces porque Maqueda no va a continuar y a partir de ahí puede empezar a haber dificultades para reunir quórum en la Corte o para una determinada votación”, cerró.