El uso de pistolas Taser y la falta de personal especializado quedaron en el centro de la escena tras un llamativo episodio ocurrido en una casa de calle Belgrano.
Un episodio digno de una serie policial sacudió días atrás a San Rafael: un hombre se atrincheró durante horas en una vivienda de calle Belgrano y amenazó con quitarse la vida, lo que obligó a la Policía a montar un operativo tan cinematográfico como inusual para la zona.
Para resolver la situación, debieron viajar efectivos desde el Gran Mendoza con pistolas Taser, ya que en el departamento sureño —según denunció el senador justicialista Mauricio Sat— no habría personal capacitado para usar este armamento ni unidades disponibles.
El operativo, que terminó de forma exitosa tras la reducción del hombre, abrió un interrogante inesperado: ¿por qué San Rafael no cuenta con equipos ni especialistas para una intervención de este tipo?
En la Legislatura, Sat consiguió la aprobación de un pedido de informes para conocer los costos del despliegue y obtener detalles sobre la formación, distribución y disponibilidad del personal entrenado en el manejo de Taser. También pidió explicaciones sobre la ausencia de un negociador profesional en uno de los departamentos más grandes de la provincia.
Un caso que comenzó como un hecho policial terminó convirtiéndose en una pregunta de fondo: ¿está preparada la provincia para afrontar emergencias que requieren equipos y capacitación específica?
