Así lo informan desde el Ministerio de Seguridad que busca imágenes en cámaras particulares, ya que la que se encuentra en el lugar no logró grabar imagen alguna. Los heridos involucrados no han proporcionado datos que ayuden a la investigación
No será sencillo dar con el paradero de los asesinos del hincha de Gimnasia y Esgrima, al menos, así lo indica la Policía de Mendoza que no tiene sospechoso a quien seguirle los pasos.
A eso hay que sumarle que los hinchas que se enfrentaron y resultaron heridos en la reyerta no han proporcionado información alguna.
Nicolás Balle es la víctima mortal que dejó la gresca provocada minutos antes del debut del Lobo en el certamen de la Primera Nacional ante Defensores de Belgrano.
El sangriento episodio sucedió en las inmediaciones del estadio Víctor Legrottaglie, entre calles Juan B. Justo, Lencinas y Boulogne Sur Mer. El Ministerio de Seguridad informó que la cámara que se encuentra en el lugar no se encontraba grabando en el momento de la batahola que se produjo entre dos facciones de la hinchada Blanquinegra que además arrojó a otro herido, de gravedad, en el Hospital Central.
Se trata de Ramón Ricardo Balle (52), líder de la facción de la barra con asiento en el barrio Jesús Nazareno de Guaymallén y padre de la víctima fatal. Según el último parte de salud, Ramón Balle tiene un hematoma epidural y múltiples fracturas faciales por lo que fue intervenido quirúrgicamente y quedó alojado en terapia intensiva del Central.
Lo más llamativo de este es conflicto es el motivo por el cual se desató. Allegados a la hinchada aclaran que no es por un asunto de dinero, poder territorial o venta de drogas, sino, por un asunto de polleras.
La Policía espera que algunos de los involucrados cuente algo para poder enhebrar este caso que ha enlutado al fútbol de Mendoza.