Una fortísima precipitación de piedra, granizo y agua, con fuertes ráfagas de viento y actividad eléctrica castigó a distritos de Rivadavia, Junín y San Martín. Donde cayó no dejó nada a su paso, incluso hubo vecinos que vieron afectadas seriamente sus viviendas y automóviles. Calculan unas 4 mil hectáreas afectadas
Los primeros informes oficiales, luego de la fortísima tormenta de la noche del miércoles en Mendoza, arrojaron que los daños fueron totales donde cayó piedra, granizo y mucha agua, acompañada por fuertes ráfagas de viento y alta actividad eléctrica.
Así resultaron afectados distintos distritos, por un total de unas 4 mil hectáreas afectadas, en los departamentos de Rivadavia, Junín y San Martín, en una línea que une a Santa María de Oro con Alto Verde, dejando nada sano a su paso, desde cultivos como viñedos hasta techos y vidrios de casas y automóviles que no lograron ser guarecidos del bravo temporal que nuevamente azotó a la Zona Este de Mendoza.
“Creo que San Martín es el departamento con menor afectación en cuanto a cantidad de hectáreas, pero Rivadavia y Junín fueron los más afectados por la tormenta de anoche“, compartió Mario Abed, vicegobernador de Mendoza, en el programa Lado A de Radio Jornada, luego de un primer sondeo tras la contingencia climática que castigó a ese oasis productivo.
El hombre oriundo del Este de Mendoza, admitió que “hemos estado tratando de solucionar los problemas en las viviendas que sufrieron daños por la piedra de anoche. Así hemos estado evaluando la contingencia desde anoche con Miguel -Ronco, intendente de Rivadavia- sobre todo con la voladura de techos que se produjo. La tormenta en Rivadavia ha sido de Sur a Norte y en ese lugar lo que afectó mucho fue el fuerte viento. Ya en Junín la piedra era sumamente grande y ha sido muy fuerte”.
Amén de los daños de tipos sociales, donde hubo techos de madera perforados por la piedra, que están ocupando a las direcciones de desarrollo social de los departamentos de Mendoza afectados por la contingencia climática, la vitivinicultura fue ferozmente afectada considerando que había viñedos en los que se estaba produciendo la cosecha o estaban a punto de ser cosechados en sus variedades -de uvas- más tardías en cuanto a maduración.
“La precipitación de la piedra duró entre unos seis o siete minutos y por lo que hemos visto hasta el momento hay unas 4 mil hectáreas afectadas. La asistencia está siendo liderada por los intendentes de los departamentos afectados. Nosotros venimos asistiendo con todo lo que podemos desde la provincia. También estamos trabajando en conjunto con Enrique Vaquié -ministro de Economía- y con Ana María Nadal -ministra de Salud- con el fin de ayudar tanto a la producción como en lo social”, manifestó Abed.
Según lo ordenado por el gobernador, Rodolfo Suarez, “es estar lo más cerca de la gente que ha sufrido por la tormenta de anoche y en esto los que más saben lo que sucede son los mismos intendentes. Siguen los créditos a sola firma en el ministerio de Economía, en el Fondo de la Transformación, sigue el seguro agrícola y todas las demás herramientas que están al servicio de los afectados. En este momento se está trabajando en ese sentido en departamentos como Rivadavia. Y esta mañana estuvimos en Junín”.
El vicegobernador remarcó que “la orden es clara, tenemos que estar al lado de los productores. Esta mañana en reunión con Vaquié y Moralejo se acordó poner todas las asistencias posibles a disposición. Como el Repro que está destinado para que los productores puedan seguir cobrando algo y de esa manera se sigan trabajando las fincas. La tormenta ha sido muy fuerte y, según los especialistas, Mendoza es donde ocurren más contingencias de este tipo en el mundo“.
“Es terrible cuando uno palpa y lo vive. Hoy hemos estado recorriendo lugares afectados y la verdad es difícil cuando se ingresa a una calle y se observan los daños, sobre todo a quienes estaban cosechando y hoy se encontraron con tamaño desastre. Ahí se vive lo doloroso y la parte fuerte luego del paso de una tormenta tan fuerte. Hoy se estaban cosechando todas las uvas criollas. Es muy duro”, calificó Abed desde el Este de Mendoza.