El ministro de Defensa y candidato a diputado nacional enfrenta críticas por su doble rol, polémicas en redes sociales y denuncias de posibles irregularidades en contratos públicos. Su campaña en Mendoza 2025 se desarrolla en medio de cuestionamientos legales y políticos que podrían afectar su futuro electoral.
Hace más de un año, Luis Petri generó críticas en redes por un spot cinematográfico promocionando su gestión como ministro de Defensa, asociado al presidente Javier Milei. Usuarios consideraron el video ridículo o innecesario, mientras que otros cuestionan su coherencia política y la gestión de los recursos militares bajo su mando. La polarización en redes refleja apoyos y críticas intensas, vinculadas tanto a su visibilidad pública como a las políticas de defensa que representa.
Doble rol: ministro y candidato a diputado nacional
Luis Petri compite por una banca en Mendoza 2025 como parte de La Libertad Avanza con el apoyo del radicalismo local liderado por Alfredo Cornejo. Lidera las encuestas con cerca del 37,5% de intención de voto, mientras Milei registra alta desaprobación en la provincia. Su candidatura, forzada por Milei según fuentes internas, combina un cargo ministerial conflictivo con una campaña electoral activa, generando debate sobre su capacidad para cumplir ambos roles simultáneamente. Se espera que renuncie a su cargo ministerial en diciembre de 2025 al asumir su banca en Diputados.
Tensiones internas y percepción pública
El desempeño de Petri provoca reacciones encontradas: fuerte respaldo en Mendoza y críticas por su gestión y posturas políticas. La combinación de funciones amplifica la atención mediática y las denuncias sobre el uso de recursos públicos, intensificando el escrutinio sobre su campaña.
Marco legal y prohibiciones constitucionales
La Constitución Nacional y el Código Electoral prohíben el uso de recursos públicos con fines electorales. Esto incluye actos de gobierno, inauguraciones de obras, planes oficiales y utilización de bienes del Estado durante los 25 días previos a las elecciones. El doble rol de Petri requiere separación estricta de funciones y recursos, y cualquier incumplimiento puede derivar en sanciones legales y judiciales.
Implicancias para su campaña
El uso indebido de recursos oficiales o personal militar en actividades partidarias podría constituir violación a la ley, alimentando denuncias y polémicas. La transparencia y la fiscalización son esenciales para garantizar una competencia electoral equitativa.
Presencia de personal militar y transporte oficial en campaña

El uso de aviones del Estado o la participación de personal de las Fuerzas Armadas en actos políticos está estrictamente regulado. Petri debe garantizar que su campaña no dependa de recursos estatales para evitar infracciones legales y cuestionamientos éticos.

La fiscalización de estos hechos suele generar denuncias y polémica, especialmente en contextos de alta competitividad política como las elecciones Mendoza 2025.

Escándalos judiciales y políticos
Petri enfrenta varias investigaciones, incluido el llamado “SpagnuoloGate” o “CoimasGate”, vinculado a contratos de la Agencia Nacional de Discapacidad con empresas investigadas por corrupción. La oposición exige transparencia y rendición de cuentas sobre estos contratos y su impacto en IOSFA, la obra social de las Fuerzas Armadas.
Impacto en la campaña electoral
Estos escándalos, junto con su doble rol y la relación con Javier Milei, colocan a Petri bajo fuerte presión política y mediática. Su imagen en Mendoza se ha visto afectada, generando una campaña más defensiva que propositiva, y elevando la incertidumbre sobre su futuro político inmediato.