Tras casi cinco meses en preventiva, el cirujano oftalmólogo Pedro Miranda recuperó su libertad luego de que un tribunal de tres jueces resolviera de manera unánime que su detención carecía de fundamentos sólidos. La decisión marca un giro en un caso que generó gran repercusión en la provincia.
El profesional de la salud Pedro Miranda, quien fuera sorprendido por una orden de detención y posterior encarcelamiento por casi cinco meses en la provincia de Mendoza, acusado supuestamente por pacientes oftalmológicos, recobró su libertad gracias a un beneficio del tribunal actuante en su proceso. Hasta el momento es inocente.
Desde el inicio, Miranda y su defensa sostuvieron que su detención fue injustificada. Con una extensa trayectoria en la medicina y el reconocimiento de sus pacientes, el especialista se vio envuelto en un proceso judicial que lo privó de su libertad sin ningún tipo de condena.
El Tribunal conformado por los jueces Agustín Chacón, Rafael Escot y Carolina Colucci analizó nuevamente los elementos presentados y concluyó que no existían riesgos de fuga ni pruebas contundentes que justificaran la prisión preventiva revocando el fallo de la jueza Cabeza. Con su liberación, se reabre el debate sobre el uso de esta medida y su impacto en la vida de los acusados antes de una sentencia definitiva.
Confío en la Justicia y en que la verdad prevalecerá. Este ha sido un capítulo difícil, pero miraré hacia adelante con la tranquilidad de haber actuado siempre con integridad”, expresó Miranda tras salir del penal.
El caso de Pedro Miranda ha dejado interrogantes sobre el criterio aplicado en ciertas decisiones judiciales y el impacto mediático en situaciones donde no hay una condena firme. Mientras tanto, el cirujano inicia una nueva etapa tras recuperar su libertad.