La crisis hídrica expuso la baja eficiencia del riego por manto, usado en más del 90% de las fincas mendocinas. En el Congreso Internacional del Agua 2025, especialistas y autoridades coincidieron en que la tecnificación y la inversión son hoy la única defensa real del recurso.
El avance de la crisis hídrica volvió a exponer las limitaciones del riego por manto, la herramienta más usada en los oasis productivos de Mendoza. Según datos del Departamento General de Irrigación (DGI), este método provoca pérdidas del 45% al 50% del agua aplicada, un nivel de ineficiencia que el Gobierno de Mendoza busca revertir con obras y financiamiento para impulsar la tecnificación.
¿Qué dijo el Congreso Internacional del Agua 2025 sobre el riego en Mendoza?
El encuentro, que reunió a unos 800 participantes, instaló un mensaje central: la defensa del recurso hídrico se sostiene con eficiencia e inversión más que con protesta. Bajo el lema “Hacia un nuevo acuerdo por el agua”, especialistas locales e internacionales señalaron que la baja tecnificación es uno de los mayores desafíos de la provincia.
¿Cuánta agua se pierde hoy con el riego por manto?
Las cifras del DGI revelan que el riego superficial, utilizado en más del 90% de las fincas, genera filtraciones y pérdidas que rondan entre el 45% y el 50% del total aplicado. Esto significa que solo una fracción del recurso llega realmente a los cultivos. Mientras tanto, los sistemas presurizados como goteo o aspersión apenas alcanzan entre el 8% y el 10% de la superficie.
¿Qué obras impulsa Irrigación para mejorar la eficiencia?
El organismo provincial priorizó proyectos destinados a modernizar la infraestructura hídrica. Entre las obras destacadas se encuentra la modernización del sistema del Canal Calise, que incluye un reservorio de 190.000 m³ y el revestimiento de 19 kilómetros de canales.
Otro proyecto clave se desarrolla en la Inspección de Cauce Arroyo Yaucha y Aguanda, con un reservorio de 90.000 m³ y una red de tuberías presurizadas de 27 kilómetros que permitirá riego a demanda para más de 1.100 hectáreas.
¿Qué financiamiento y proyectos nuevos fueron anunciados?
Durante el Congreso se firmaron convenios con organismos nacionales e internacionales destinados a facilitar el acceso a tecnología y créditos para pequeños y medianos productores. Además, el DGI confirmó una próxima licitación en la cuenca del río Diamante, con un presupuesto superior a los 13 mil millones de pesos, para llevar riego a demanda a más de 1.000 hectáreas.
¿Por qué la provincia considera imprescindible un cambio cultural?
El superintendente Sergio Marinelli remarcó que el valor cultural del agua en Mendoza debe acompañarse de responsabilidad en su uso. Señaló que no es coherente reclamar por el recurso si dentro de la finca se mantiene un sistema que provoca grandes pérdidas.
El consenso entre especialistas fue claro: la tecnificación permite “cosechar agua”, reduce pérdidas y asegura disponibilidad en un contexto de sequía prolongada.