Se trata de una de las compañías instaladas en el Parque Tecnológico de Mendoza. Mediante la integración de empresas y con el respaldo de organismos tecnológicos, se encuentran en proceso de aplicar un sistema de trazabilidad que permitirá a las bodegas y alimenticias locales llegar a nuevos mercados exportadores.
Una empresa mendocina se encuentra en período de prueba para lanzar al mercado local un desarrollo tecnológico que permitirá que un consumidor de vino mendocino en cualquier parte del mundo pueda conocer en detalle todas las características de la bebida: año, cosecha, si es orgánica o no, entre otros datos.
Se trata de un sistema de “trazabilidad”, con tecnología blockchain, un requisito que cada día se pide más en la Unión Europea y que, además, no podrán evitar las empresas que quieran seguir ganando mercados exportadores. Por ahora, se está probando en dos bodegas locales. Luego de la vendimia estará listo para su comercialización. Más adelante, servirá para ser aplicado a cualquier industria alimenticia.
Así lo explicó Alberto Garriga, titular de CASE SA, la empresa detrás del desarrollo. La firma posee 24 años de vida y tiene su foco puesto en el desarrollo tecnológico, en la gestión de empresas y en la posibilidad de combinar los sistemas ERP (Enterprise Resource Planning) software que las organizaciones utilizan para gestionar las actividades empresariales diarias, con otros paquetes de programas informáticos y aplicaciones.
“Nuestras oficinas están en el Parque Tecnológico, desde donde hemos tenido un crecimiento en desarrollos de aplicaciones y desarrollo de integraciones. Tenemos más de 20 personas trabajando, pero cuando llegamos al parque éramos solo 7. Somos una empresa beneficiaria de la Ley del Conocimiento, porque eso es lo que vendemos, no solo productos conocimiento”, agregó Garriga.
En este marco, el empresario explicó que la tecnología blockchain (cadena de bloques con información codificada en una transacción en la red), permite que la información que acompaña a cualquier producto sea inalterable, y asegura que cualquier consumidor del exterior reciba detalles certificados. “Garantiza, de alguna manera, lo que está diciendo la etiqueta de un vino, es decir, tanto el origen como la composición de un producto”, agregó.
“Nuestra plataforma va a permitir que esa información registrada con esa tecnología llegue al consumidor final y también a toda la cadena de distribuidores del vino. Se basa en certificar calidad y origen, y abre el camino para otros rubros. Hoy hablamos de vino, pero va a estar disponible para trazar los productos de otras industrias, alimenticias en general”, agregó Garriga.
Para lograr la aplicación de esta tecnología tan compleja, CASE trabaja con una empresa de Panamá, que aporta la tecnología blockchain. Se respalda con un proyecto del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), con participación de la Universidad de Barcelona, y es financiado por la Comunidad Económica Europea.
La presentación del proyecto
“El proyecto va a ser presentado el próximo miércoles 22 de noviembre en un evento en el Parque Tecnológico. Invitamos a todo el mundo del vino a participar. Luego de la vendimia, ya va a tener forma comercial”, sumó el titular de CASE SA.
El evento será a las 10.30 en Rafael Cubillos 2056, de Godoy Cruz, Mendoza (Parque TIC).
Federico Morábito, director de Innovación y Desarrollo Económico, a su vez presidente de la Agencia Mendocina de Innovación, Ciencia y Tecnología, comentó: “Mendoza viene dando pasos muy importantes en cuanto al desarrollo de herramientas basadas en el conocimiento. Se viene posicionando tanto a nivel nacional como internacional, como ocurre con este caso específicamente, y es allí donde desde el Estado debe estar presentes acompañando el desarrollo y crecimiento de nuestras pymes”.
La necesidad de “trazar” el mundo del vino
Hasta el momento, la empresa ha venido trabajando con dos bodegas mendocinas con las que se completará la “experiencia piloto”, pero en el futuro se espera que la trazabilidad en todos los productos sea un requisito para exportar.
“Lo que se viene, en cuanto a las exigencias del Mercado Común Europeo, es, justamente, que quien compra un vino fraccionado pueda conocer cada movimiento que se hizo, desde sus orígenes, hasta que llega al consumidor, y será condición para poder entrar a los mercados”, explicó Garriga.
En cuanto al costo, el empresario responsable de CASE señaló que toda certificación hoy requiere de costos. Mientras que, hasta el momento, las que se realizan se centran en “lotes de producto”, esta tecnología permitirá conocer la trazabilidad en el 100% de la producción y, realmente, será un servicio complementario a otros softwares de gestión que ya requieren las empresas.
En este sentido, Morábito añadió: “CASE es un ejemplo concreto de que aún existen muchas necesidades por cubrir por parte de los distintos sectores productivos. Contar con una herramienta de trazabilidad en los distintos sectores productivos permitirá captar la atención de nuevos mercados, que cada vez son más exigentes. Mendoza está creciendo y avanzando para cumplir con los requerimientos y necesidades de los mercados internacionales”.
“Hay que tomar esto con mucha responsabilidad y hacerse cargo. Habrá que dar todo el apoyo”, resaltó el titular de la Unión Industrial de Mendoza (UIM), Mauricio Badaloni en los micrófonos de Radio Jornada. El empresario fue entrevistado en el programa Lado A y más allá de su respuesta inicial, se percibió dubitativo con la situación actual.
“Desde las uniones industriales gremiales hay gran temor en lo que viene, porque hay una deuda privada en dólares muy importante”, destacó.
Sin embargo se mostró proclive a incentivar el cambio que ya comenzó. “No hay que dejarlo solo a Milei en estas ideas del cambio, de la libertad. Hay que aguantarlo, hacerse cargo y poner nuestro grano de arena, para que nuestros hijos no se vayan, para que nosotros, desde el lugar que nos toca, el de la producción, el desarrollo de la economía y la generación de empleo y riqueza, empecemos a ver cómo nos insertamos en el mundo globalizado”, enfatizó.
Por su parte, Walter Bressia, presidente de Bodegas de Argentina, también se mostró expectante al ser consultado en el mismo programa de Radio Jornada. “Hasta ahora hay sólo algunos anuncios y lo tomamos con fuerte expectativa”, señaló el bodeguero.
Bressia remarcó que uno de los puntos que más preocupa al sector en la actualidad, es el juego de importaciones y exportaciones. “Nos preocupa no sólo por el tipo de cambio, ya que el dólar oficial que tenemos nos complica porque nos ha hecho perder el mercado y hemos dejado de ser competitivos sino también por las importaciones, porque nuestros sector para seguir manteniendo el nivel de calidad que ha alcanzado y poder abastecer a los mercados externos y al interno, se nutre de muchos insumos que son importados”, completó.
El referente de Bodegas de Argentina apuntó también a las economías regionales y quiso destacar su optimismo en lo que puede venir desde la nueva gestión. “Quiero ser optimista. Hoy las economías regionales son prácticamente pymes, pero seguirán apostando a la producción”, indicó el bodeguero que además intentó comprender en lo nuevo, “una completa visión federal” y concluir sobre la actitud del equipo que está armando Milei: “parece que no quiere improvisar”.
Quien también hizo pública su percepción, fue el presidente de la UCIM, Daniel Ariosto. “Toda elección presidencial simboliza esperanza renovada, más aún en esta oportunidad en la que el país se encuentra sumergido en una grave crisis económica que trasciende a otras áreas de nuestra sociedad”, dijo, un comunicado de la organización que preside.
El referente local felicitó al nuevo Presidente y se mostró optimista al plantear su deseo de “que pueda llevar adelante todas las transformaciones que necesita el país”, al tiempo que puso a la UCIM y a la entidad nacional que los nuclea, la Cámara Argentina de Comercio y Servicios, “a disposición” de la nueva gestión de Milei.