Tras prestar testimonio en una causa por amenazas al fiscal del caso Bento, Dante Vega, el profesional del foro local recibió una condena por un duro audio
El abogado Jaime Andrés Alba fue acusado por Fiscalía Federal como un miembro de la banda criminal que gestionaba coimas para Walter Bento en el marco del megajuicio que se le sigue al exjuez federal. Luego de brindar su testimonio ante el tribunal, donde negó todas las acusaciones en su contra y reiteró el fundamento usado en varias ocasiones de que se trata de una causa armada, fue declarado culpable.
“Soy totalmente inocente. No tengo absolutamente nada que ver con los hechos que me imputan. Son falsos desde el inicio al fin. Nunca tuve relación con el doctor Bento. Tuve muy pocas causas en su Juzgado y siempre me fue mal. Nunca obtuve ningún beneficio para ningún cliente”, comenzó a defenderse luego de responsabilizar al fiscal Dante Vega.
Consideró que tanto él como otros procesados “somos un daño colateral necesario para que esté sentado acá Walter Bento, porque él sólo no podía estar acusado”. Agregó que “la hipótesis delictiva del fiscal Dante Vega existe sólo en su imaginación”.
Alba fue acusado luego de que el fiscal Vega denunciara amenazas en el 2021 en cuya investigación saltaron a la luz algunas pruebas como audios que involucran al abogado. Es en una conversación con el informante policial Enzo Stuto donde Alba señala “Es un salame el Vega. Yo le decía al Bento que ellos son funcionarios y tienen que hablar por escrito. Yo hablo a las trompadas. Al Vega le saco la concha. No es más fiscal donde yo esté, que me va a hacer una causa por lesiones”. Luego agrega “lo hago matar al Vega. Lo voy a mandar a saetear”, agregando que compró un fusil calibre .308. “Compré para que lo maten al culiado, te lo juro por mis hijos. Lo voy a hacer pija, lo voy a demacrar a ese culiado. No sabe dónde se ha metido”, insistió.
En su testimonio, Alba admitió que tenía una relación desde la infancia con Diego Aliaga, considerado como un miembro clave de la organización y que fue asesinado a mediados de 2020 y señalo que “le sacaba plata a los perejiles, pero no hacía nada”.
Denunció haber sufrido torturas durante sus días de detención con el fin de que declare como arrepentido en el expediente.
El testimonio finalizó tras una hora y media donde fue sentenciado a 6 meses de prisión en suspenso.