En el corazón de Carrodilla, una mujer, su madre y su hermana transformaron su propio hogar en un comedor comunitario. Lo que comenzó como una charla familiar hoy alimenta a decenas de vecinos que enfrentan la crisis económica.
En medio de un panorama económico cada vez más ajustado, una iniciativa solidaria se abrió paso en Carrodilla, Luján de Cuyo. Paola Rodríguez, junto a su madre y su hermana, decidió abrir las puertas de su casa para fundar un comedor que hoy alimenta a más de 70 familias.
El proyecto comenzó a principios de este año, sin planificación previa. Todo surgió de conversaciones cotidianas que reflejaron la dura realidad que atraviesan las familias de la zona.
Paola, de 34 años, madre de cuatro hijos y ama de casa, contó que la idea nació al compartir inquietudes con otras madres en la escuela. “Fue algo que se inició desde la charla en casa, pensando qué podíamos hacer para ayudar”, recordó. Con un pequeño aporte familiar, comenzaron a cocinar los sábados para los vecinos.
“Siempre que llegan donaciones y tenemos todo lo necesario para cocinar, avisamos y los vecinos se vienen con los táperes”, explicó.
El esfuerzo detrás de cada plato
El comedor comenzó asistiendo a 43 familias y hoy ya alimenta a 71. Se sostiene gracias al esfuerzo de Paola, su madre, su hermana y su esposo —trabajador de la construcción—, quienes cocinan y gestionan donaciones.
Aunque Paola admite que le cuesta llegar a fin de mes, nunca dejó de ayudar. “He tenido que sacar de mi casa, de lo mío, para dar de comer. No puedo decir que no cuando me preguntan si hoy vamos a cocinar”, contó con emoción.
La joven asegura que la necesidad creció en los últimos meses: “Siempre hubo gente humilde, pero no a este extremo como ahora”.
Un llamado a la solidaridad
El comedor funciona los sábados, ya que la falta de alimentos —especialmente proteínas— impide abrir más días. Reciben verduras de la feria, pero la carne y otros productos básicos son difíciles de conseguir.
Además de comida, la familia reparte ropa donada que los vecinos pueden elegir libremente.
Quienes deseen colaborar pueden comunicarse con Paola al 261 305-1394 o con Mica al 261 270-3902. El comedor está ubicado en Barrio Los Alerces I, Manzana 19, Casa 30, Luján de Cuyo.
El gesto de Paola y su familia muestra que, incluso en tiempos difíciles, la solidaridad sigue siendo el motor que sostiene a las comunidades mendocinas.
Fuente: Jazmín Rivera – Jornada Online.