Por CAROLINA JACKY / Como ya habíamos adelantado en otras notas, el sistema de frentes electorales con el único fin de llegar al poder, y sin importar ideologías ni principios, estaba llegando a su fin.
El fin se esperaba, aunque nunca que llegara de mano de un outsider que en dos años de diputado pasara a Presidente de la República.
Los acuerdos, negociados, arreglos, entre las fuerzas politicas que nos acompañaron desde 1983 han quedado al desnudo con la caída de la Ley Ómnibus.
Nada será igual a partir de ahora.
El pueblo está padeciendo un ajuste sin precedentes, mientras la vieja política se niega a desprenderse de sus “cajas”.
Los fideicomisos son cajas, las fundaciones y los entes también, y si a esto le agregamos “la pauta”, las cooperativas que conocimos con el affaire de la Municipalidad de Las Heras, y mientras una Intendenta es escrachada por comprar un iPhone 14, sin dudas estamos ante el fin de los frentes y de los políticos que no decidieron cambiar.
Mientras JxC practicamente está terminado como tal, también veremos pronto que UxP pasará por otro colapso.
Viene un reacomodamiento de las fuerzas politicas, y algunos socios de hoy deberán decidir donde estar o quedarse.
La corrupción provincial ha quedado expuesta, y Mendoza no esta excenta.
La pregunta es sobre que camino elegira la dirigencia actual provincial y municipal seguir a partir de mañana.
De un lado quedaran los denunciados de corruptos, traidores, lo que el Presidente denomina “casta”, del otro los que se unan al cambio que propone Milei, quedando un espacio para aquellos que fieles a principios e ideologías abandonen todo acto de corrupción y demuestren con hechos rechazar las cajas, aunque no compartan la ideología del Presidente.
En honor a la verdad, no achaquemos todo a los políticos, también tienen socios en el sector privado.
Se los conoce, se los identifica, siempre están en la foto o en las licitaciones.
Se repiten nombres y empresas, hasta impúdicamente en los carteles de las obras públicas.
Mientras esto sucede no tenemos salud, educación, seguridad, y nuestros jubilados deben padecer el ajuste mientras ven que otros año tras año aumentan su patrimonio, y en forma desvergonzada lo muestran en sociedad.
Mendoza no estará excenta de estos cambios, ya nada lo detiene, la mugre está saliendo a flote, se siente el olor y hasta se ve, y el pueblo está agotando su paciencia.
En 2025, el año que viene, hay elecciones legislativas, si el Gobierno Nacional logra estabilizar la economía, muchos de estos dueños de los curros, Señores del Poder, perderán sus privilegios.
El reagrupamiento por ideologías y por principios, seguramente nos hará ver separados a los que hoy están juntos y juntos a los que antes veíamos separados.
Se terminará la hora de las especulaciones, el pueblo no lo soportará, y será muy duro a la hora de votar.
Los cambios permitirán un mayor juego de las instituciones, sin pautas, sin cajas, y en política tendremos no solo libre competencia, sino lealtad electoral y política.
Esperemos que terminen los tiempos de los aparatos financiados por los que menos tienen, con la plata del pueblo, el fin de los señores feudales y de la coptación de todos los poderes.
Nuevos aires aparecen en el escenario.