María Luisa Lezcano, una mendocina de 40 años, involucrada en la búsqueda de Loan Peña, es ahora investigada por la Justicia por presunta mitomanía y posible manipulación de pruebas
La desaparición de Loan Danilo Peña suma un nuevo y sorprendente capítulo con la inclusión de una mendocina en la investigación. María Luisa Lezcano, quien se presentó como perito experta y participó en los primeros días del caso en Corrientes, se encuentra ahora en el centro de una investigación judicial. Con antecedentes de presunto comportamiento mitómano, Lezcano es sospechosa de haber alterado o exagerado su papel en la búsqueda de Loan y de haber realizado declaraciones y peritajes dudosos.
Desde los inicios de la búsqueda del niño, Lezcano fue una figura constante en la escena
Desde los inicios de la búsqueda del niño, Lezcano fue una figura constante en la escena, participando en rastrillajes junto a bomberos y entregando a la Policía un supuesto análisis grafológico de firmas de tres sospechosos, Mónica Millapi, Daniel “Fierrito” Ramírez y Bernardino Benítez. Sin embargo, la autenticidad de su intervención quedó en duda tras el allanamiento de su casa en Colonia Las Rosas, Tunuyán, ordenado por la Justicia Federal de Goya, que instruyó a la Policía Federal a incautar su celular en busca de evidencia.
Los giros sospechosos de Lezcano
Lezcano no solo intervino en la investigación de Loan, sino que también protagonizó una serie de entrevistas televisivas en las que se presentó como “especialista en búsqueda de personas desaparecidas”. Llegó incluso a dictar un curso sobre el caso en una universidad de Mendoza, consolidando así su perfil como una supuesta experta en el tema. Pero el origen de su reputación como perito en casos de desaparecidos ha comenzado a cuestionarse.
Uno de los puntos más controversiales en torno a Lezcano es su rol en la entrega de un análisis grafológico que, según las investigaciones, habría sido realizado por una grafóloga cordobesa a la que Lezcano había contactado previamente. Lezcano habría intentado atribuirse el análisis, usándolo como una prueba en el expediente del caso, lo cual ha generado interrogantes sobre su ética y profesionalismo.
Testimonios y llamados a aclarar su rol
El martes pasado, Lezcano declaró como testigo en la causa por videoconferencia y fue citada nuevamente para el miércoles. Ante sus declaraciones, se decidió llamar al comisario general Héctor Rodríguez, jefe de Delitos Complejos de la Policía de Corrientes, para corroborar los detalles de la convocatoria de Lezcano y evaluar si efectivamente fue solicitada su intervención en el caso de manera formal.
Además, la Justicia ha citado a declarar a la grafóloga cordobesa el próximo 15 de noviembre. Esta testigo es crucial, ya que ella misma habría sido contactada por Lezcano para realizar el análisis de las firmas que posteriormente Lezcano presentó como propios en el expediente.
Los antecedentes de Lezcano revelan que no es la primera vez que se encuentra bajo sospecha
Una historia de engaños previos
Los antecedentes de Lezcano revelan que no es la primera vez que se encuentra bajo sospecha. Años atrás, fue denunciada por haberse hecho pasar por personal militar, una conducta que los investigadores consideran como parte de un perfil mitómano. Esta historia de engaños previos ha generado preocupación sobre la seriedad de su participación en la búsqueda de Loan Peña y sobre el posible impacto de sus acciones en el desarrollo de la causa.
Ahora, la Justicia de Goya debe aclarar cómo Lezcano se infiltró en la investigación y si su participación obedece a una búsqueda de reconocimiento personal o a una posible patología. Este inesperado giro en el caso deja en claro que la desaparición de Loan Peña sigue arrojando incógnitas, y el rol de la mendocina María Luisa Lezcano se ha convertido en uno de los elementos más intrigantes y polémicos de la causa.